domingo, 21 de julio de 2024

023 - Interesadas interpretaciones para medias verdades (2 de 2)

 

La revolución de Chacón y sus "chaconeras". 


        Mariana Cortés y Asunción Lledó Alarcón, “La Santera”, desde 1899 fueron destacadas integrantes de la Sociedad de Estudios Psicológicos “La Caridad” y en octubre de 1910, formarán parte de aquel colectivo de trabajadoras alicantinas que fundarán el sindicato de mujeres “La Feminista”. En “La Feminista”, las cigarreras constan como cofundadoras, formando parte del conglomerado de los muchos “Oficios Varios” que las aglutinaban.

 

Collage sobre la ilustración realizada por Naím Sousa para la publicación "Historia de Alicante - Entre dos castillos" promovida por el Departamento de Memoria de Alicante, Concejalía de Cultura y Ayuntamiento de Alicante. Proyecto coordinado por Pablo Rosser Limiñana - 2021

 

           Puntualizando en este controvertido dato: las cigarreras formaron parte de “La Feminista” y participaron siendo cofundadoras, pero …no es correcto el presentar a este sindicato como nacido desde el seno de la Fábrica de Tabacos de Alicante, por sus cigarreras y para sus cigarreras. Por muy bien que quede en los proyectos de homenaje o de remembranza histórica, no es correcto.

 

        Otros tres nombres de cigarreras alicantinas son también públicamente reconocidos como partícipes de relumbre y gran activismo desde su inclusión a “La Feminista” hasta llegar a la integración como sección local alicantina en la organización obrera Unión Tabacalera: son Carmen Martínez, Josefa Ramos y Remedios García.

 

Muy escasos son los testimonios gráficos sobre las cigarreras alicantinas. En esta ocasión, la publicación Unión Tabacalera, en su número de febrero de 1929 y en su "Galería de luchadoras", recogió este retrato de nuestra Carmen Martínez describiéndola poco menos que así: Operaria del taller de cigarrillos manuales y mujer de firmes convicciones. Destacada activista obrera y distinguido referente en la solidaridad vecinal y ciudadana.

 

        Y aquí vuelve a darse una de esas controvertidas “interpretaciones al uso” y que se resuelven con una redacción imprecisa que deja al albur y a las intenciones protagónicas tanto de los redactores como de los lectores, la concepción y parto de esta organización obrera: en casi todos los escenarios nacionales donde hubo una fábrica de tabacos que funcionara y donde se quiere agasajar y homenajear a las cigarreras, se las hace protagonistas del activismo feminista y se las presenta como “primeras fundadoras” de la Unión Tabacalera. De nuevo …la intencionada interpretación.

 

        La Unión Tabacalera nace en octubre de 1916 en la fábrica de La Coruña, bajo un nombre y una intención inicial sólo local …Sociedad Montepío del personal femenino de la fábrica de tabacos. Sus objetivos teóricos vienen a ser los ya conocidos desde la creación de las “primeras” Hermandades de Socorro de las Cigarreras: el auxilio y la resistencia de las cigarreras ante los casos de baja laboral por enfermedad y sus gastos médicos y farmacéuticos, y ante el fallecimiento y el auxilio para dar digno y cristiano enterramiento a las desafortunadas finadas. Su objetivo práctico derivó inmediatamente hacia la reivindicación de los derechos laborales en la lucha obrera.

 

        Haber entrecomillado “primeras” Hermandades… conllevaba hacer una nueva llamada de atención porque aquí también se interpreta libremente sin una cronología correcta. En el primer reglamento moderno de 1817 publicado exprofeso para la organización de las más recientes fábricas de Alicante (1801), La Coruña (1804) y Madrid (1809), en su artículo 13, capítulo II, las Reales Órdenes establecen y obligan a la constitución “entre todas… de hermandades de socorro sobre reglas caritativas…” Entre todas …viene a referirse a las cigarreras y bajo sus propias y exclusivas aportaciones derivadas de sus ya de por sí exiguos jornales.

 

        Es decir, las “primeras” hermandades no emanan de la voluntad solidaria de las cigarreras y de su activismo feminista, su creación viene ordenada y obligada desde los gestores de la Renta del Tabaco, evitándose así los costes que pudieran derivar la salud o la muerte de las cigarreras. Después, transcurridos los años y no sin alguna que otra malversación de sus fondos por parte de los bigotudos Sres. administradores designados, sí serán las cigarreras quienes implementen y hagan funcionar ellas mismas estas hermandades. Tal es el caso de la “Sociedad de socorros y ahorro de las porteras, maestras y operarias de la Fábrica de Tabacos” en fecha de mayo de 1899, y también en La Coruña.

 


 

        Retornando con lo de la Unión Tabacalera, con su auge y efervescencia, desde La Coruña se conseguirá ir adhiriendo todos los mismos esfuerzos y proyectos del resto de las fábricas nacionales. Las cigarreras de Alicante son de las primeras en esa incorporación y también, de las de mayor afiliación. La Federación Tabaquera Española, que une a todas las secciones locales, quedará constituida en 1918, alcanzando tener presencia y representatividad en prácticamente todas las fábricas, que suman 11 en total y que, en 1921, dan trabajo a 13.700 cigarreras. En ese mismo año 1921, el 22% de la afiliación a la Unión Tabacalera, lo conforman las cigarreras alicantinas.

 

        Y para el cierre y despedida …la guinda: muy a pesar de ese notable número de cigarreras españolas -que de entre las 1.015.000 mujeres españolas censadas como población activa entre las décadas de 1910 y 1920, suponían un 1,35 % dedicadas a la industria del tabaco- y aun siendo ellas el corazón y la ilusión de aquel proyecto de la Unión Tabacalera …la cabeza pensante, el gestor que le diera naturaleza material y el que representara los derechos de las cigarreras frente a la Compañía Arrendataria de Tabacos, fue un hombre: Severino Chacón …quién, para mayor controversia y anécdota, no tenía relación familiar o profesional con el mundo industrial del tabaco.

 

        En cada fábrica, con sus cigarreras locales, la Unión Tabacalera tuvo sus pioneras y sus iniciadoras. En cada fábrica, en sus tabacaleros locales, también se dieron figuras representativas; en Alicante, lo sería el tabacalero socialista Ángel Martínez …pero, el nacimiento de la Unión Tabacalera se daría en 1916 en la fábrica de tabacos de La Coruña y su motor y cabeza pensante hasta su desaparición como asociación obrera, fue Severino Chacón Bergueiro.  Su esforzado y devoto ejército… ¡las cigarreras chaconeras!

 

Entre el 11 al 16 de julio de 1920, las cigarreras españolas asociadas a la Unión Tabacalera, se dieron cita en Madrid en el II Congreso de la Federación Tabaquera Española. De Alicante, Remedios García y Carmen Martínez, intervinieron muy dignamente en representación de sus compañeras.   "El Socialista" 12-02-1920

 

 

022 - Interesadas interpretaciones para medias verdades (1 de 2)

 

Del retraso a la reacción.

 

        Varias son ya las ocasiones en las que en estas crónicas se viene nombrando a la Unión Tabacalera y a la Federación Tabaquera Española como órganos representativos del asociacionismo laboral de las cigarreras y de los tabacaleros españoles.

 

        Convendría pues hacer una incursión en esta cuestión porque también con el paso del tiempo y con las nuevas tendencias de cómo contar la historia, algo se ha ido desdibujando para que así encajen mejor las tesis que manejan los desarrolladores de cada nuevo proyecto cultural. La tendencia ahora es de supeditarlo “todo” a la exclusiva mirada de lucha y de reivindicación feminista, y de ese modo, la historia común …en su conjunto …en su “todo”, no queda reflejada tal como debiera.

 

Interior de la Fábrica de Tabacos de Madrid - Actualidades 29-12-1909

 

        Expuesto ha quedado ya en esas otras crónicas previas, que a la condición de mujer en la industria nacional del tabaco, ya en sus inicios corriendo el siglo XVIII, ni se le puso un horizonte tan fácil, …ni tan dichoso, y que mucho hubo de trabajar en condiciones muy insalubres, con jornadas muy extenuantes, por míseros jornales de destajo y con una consideración o estima más próxima a la del acto de beneficencia que a la de ganarse la vida mediante un puesto de trabajo con plenos derechos. Estos son hechos irrefutables y constatados.

 

        Lo dejado escrito en todas aquellas primeras normas y reglamentaciones de funcionamiento de las fábricas, lo demuestra. Una gran disponibilidad en cuanto a número, jornales diarios muy bajos en los que penalizaban conceptos como escasa producción y calidad de producto acabado no aceptable, asignación de costes contra sus jornales de gastos que debían de haberle correspondido mantener a la Renta del Tabaco y lo que esos administradores de la Renta entendieron como “casi lo mejor de todo” …la pretendida e hipotética docilidad que se les presuponía -reflejo de la sociedad de aquellos momentos-, las hizo las óptimas candidatas a cubrir la mano de obra necesaria para satisfacer el notable incremento que desarrolló el comercio del tabaco al incorporarse como extendido uso social, el consumo del tabaco de humo apareciendo los mucho más populares y más asequibles cigarrillos.

 

        Para aquellos administradores y para sus planteamientos debió de parecerles poco menos que un gran éxito haberse encontrado tamaña “borrica con las albardas ya puestas”, pero, la cosa se les puso difícil en cuanto que …al pretender montarla, la “pollina” se les puso arisca y corajuda.

 

Collage sobre la ilustración realizada por Naím Sousa para la publicación "Historia de Alicante - Entre dos castillos" promovida por el Departamento de Memoria de Alicante, Concejalía de Cultura y Ayuntamiento de Alicante. Proyecto coordinado por Pablo Rosser Limiñana - 2021

 

        De lo primero que fueron conscientes todas aquellas mujeres cigarreras, tenía que ver con el elevado número que representaban si se mantenían unidas en sus defensas o reclamaciones laborales: la mala calidad del tabaco que les entregaban, los escasos jornales que se les abonaban, las sanciones o los despidos mal administrados, la incorporación de las nuevas tecnologías y la mecanización …etc., las unía solidariamente en lucha y les proporcionaba mucha fuerza para enfrentarse a la administración de la Renta del Tabaco.

 

        Para su amparo, en cada fábrica, en cada ciudad, acudían al político representativo, al notable sobresaliente o a la autoridad de mayor rango que las escuchara y apoyara. Para las cigarreras alicantinas, Eleuterio Maisonnave y José Canalejas, adquirieron competencias tan elevadas como la invocación y devoción permanente a la Santa Faz. Sus compañeras madrileñas hicieron de su Majestad, la Reina, su madrina protectora.

 

        Por esa misma representatividad en número y por su añadida condición de madres, hijas, esposas, amas de casa y ciudadanas, se dieron cuenta de su alto y temido potencial en cualquiera de las reclamaciones sociales en las que intervenían: podían paralizar el funcionamiento de la ciudad e incluso, desestabilizar la tranquila conducta ciudadana si con alguna de sus reivindicativas jornadas de brazos caídos, se provocaba un desabastecimiento de tabaco en los estancos.

 

Rebelión de mujeres en la ciudad de Málaga producida por la gran carestía de productos básicos para la subsistencia y por el desbordado negocio de la especulación en los precios.

 

        Con los mismos cambios sociales que avanzaban con aquellos tiempos, las cigarreras también lo hacían. Progresivamente siguen organizándose y avanzan hacia un cambio de mentalidad social que las lleva a la lucha de clases y que las conduce hasta los idearios políticos y de reivindicación obrera que van imperando.

 

Esta rebelión de las "faeneras" movilizó en mayoría a la ciudadanía malagueña, el proceder represor y violento de las fuerzas del orden, en cambio, dejó escrita una triste página para esa historia: cuatro muertos, de los que dos eran mujeres, y una veintena de heridos, algunos de gravedad por impactos de armas de fuego. 

 

        La primera de las referencias en este sentido para con las cigarreras alicantinas -y curiosamente es la más desdeñada por casi tod@s l@s que escriben sobre estos temas- tiene como fecha julio de 1869. Cuatro años antes de proclamarse la 1ª República Española, en Alicante, maestras y operarias de la Fábrica de Tabacos, echarían a andar uno de los primerísimos clubes políticos en España integrados únicamente por mujeres: el Club Republicano Femenino de Alicante. Dos son los nombres más representativos y mencionados entre aquellas cigarreras: Teresa Martínez y Rita Bataller, ambas cofundadoras y Rita Bataller, su presidenta.

 

        De este proceder y logro pionero, muy poc@s son capaces de señalarlo históricamente con el debido orgullo y reconocimiento. 

 


 

        En el diario El Alicantino …de la prensa católica alicantina, por abril de 1892, dará que hablar una “barbiana y leída” cigarrera, valiente, osada y esforzada activista librepensadora, feminista, espiritista y obrera con razones laborales reivindicativas. No fueron pocas las críticas y las crueles chanzas que le dedicaron algunos directores y reporteros de los diarios conservadores de la ciudad dando cuenta de su participación en diversos mítines y conferencias. Su nombre no aparece, pero, no sin una áspera crítica, El Alicantino la presenta como “la Luisa Michel alicantina”(1). Por las referencias a las intervenciones y mítines, podría tratarse de Mariana Cortés.

 

     

 

 (1) Louise Michel (1830-1905), educadora, poeta y escritora anarquista francesa, además de ser una de las principales figuras de la Comuna de París -revolución de 1871-, ella fue quien enarboló la primera bandera negra, quedando reconocida como el símbolo del activismo anarquista.Su activismo y compromiso le llevó a exponer su vida con arrojo y valentía en los numerosos combates en los que participó. Fue condenada a diez años de destierro en Nueva Caledonia, donde sus primeros 20 meses los pasó en prisión. Cumplida la condena, sus posicionamientos ideológicos seguían intactos. Su biografía, bien vale un rato dedicado a la lectura.